Una lista de lecturas rica y diversa, a la que regresa Mamita Yunai
Leonardo Garnier

Leonardo Garnier: Ministro de Educación Pública
A raíz de diversas inquietudes surgidas ante la modificación de las listas de lecturas aprobadas por el Consejo Superior de Educación para la asignatura de Español de I y II Ciclo de primaria, así como para III Ciclo y Educación Diversificada de Secundaria, deseamos realizar las siguientes aclaraciones y correcciones.
Lo primero que debe tenerse claro es que la modificación de las listas es parte de un proceso más amplio de promoción y estímulo de la lectura. El Consejo Superior de Educación viene impulsando diferentes acciones para el mejoramiento de la calidad de la educación y, en particular para la promoción del gusto por la lectura, para fomentar una actitud crítica y creativa del estudiante frente a los textos literarios y para contribuir al mejoramiento de la capacidad de comprensión lectora, así como a las destrezas y el gusto por expresarse adecuadamente en forma oral y escrita. En este contexto, el CSE solicitó al Ministerio de Educación Pública la revisión de la lista de textos literarios de los programas de estudio de la asignatura de Español, con el propósito de ofrecer a los estudiantes de primaria y secundaria una mayor variedad de libros de cuentos, novela, poesía y otros géneros literarios.
Para tales efectos, se organizaron las lecturas de I y II Ciclo por género y nivel de dificultado; las lecturas de III Ciclo se distribuyeron por género literario y las de Educación Diversificada, por época literaria. En el caso de las lecturas de III Ciclo y Educación Diversificada, se estableció la relación intrínseca con los objetivos de los programas de estudio, especificando los contenidos, procedimientos, valores, actitudes y aprendizajes por evaluar, de manera que el proceso de lectura tuviera un mayor sentido y pertinencia para estudiantes y docentes. El planteamiento de la propuesta de literatura para III Ciclo y Educación Diversificada tiene como objetivo desarrollar la competencia literaria del estudiante, haciendo que el joven se acerque al hecho literario con placer, para comprenderlo e interpretarlo, tomando en cuenta sus intereses individuales, su identidad, sus conocimientos y su contexto.
Fue con base en estos argumentos que se elaboraron las listas de lecturas que fueron discutidas con diversos especialistas de nuestras universidades y, finalmente, aprobadas por el Consejo Superior de Educación. Dichas listas buscan estimular el gusto y la capacidad lectora de nuestros estudiantes, pero no pretenden constituirse – porque no podrían serlo – en listas exhaustivas ni cerradas de lo que pueden y deben leer nuestros estudiantes: son más bien un aperitivo, una invitación guiada a la literatura, un muestrario variado y estimulante de literatura de calidad de distintos géneros, épocas, regiones y estilos.
El Consejo Superior de Educación se ha visto gratamente sorprendido por la notable reacción de diversos sectores académicos y sociales ante la modificación de las listas de lecturas. Muchas de estas reacciones han sido positivas y han mostrado su complacencia con la nueva lista de lecturas; algunas, sin embargo, han manifestado su desacuerdo con esta o aquella inclusión o exclusión y, finalmente, se han señalado algunos errores que es preciso aclarar.
Entre los últimos, destaca la confusión de dos libros que aparecieron como uno solo, mezclando el nombre de uno de los libros con el autor del otro. Se trata de La Isla del Tesoro de Louis Stevenson y La Isla Misteriosa, de Julio Verne, ambos incluidos en la lista de lecturas.
Otra aclaración se refiere a El Quijote, que erróneamente fue señalado como un libro que había sido excluido de la lista cuando, en realidad, se mantiene como lectura obligatoria en su primer tomo, pensando que esto brindaría a los estudiantes una adecuada introducción a Cervantes y a la principal obra de la literatura española, sirviendo de convite para leer la segunda parte u otras obras de Miguel de Cervantes. Como en el caso de la segunda parte de El Quijote, muchas obras de gran significado y valor literario no aparecen en la lista lo que, sin embargo, no constituye ningún juicio sobre su valor literario o histórico sino un simple reconocimiento de que esta, como cualquier lista parecida, solo puede ser un muestrario parcial, un menú introductorio a la riqueza literaria disponible. Es así que si bien la lista incluye gran diversidad de obras de calidad de muy distintos géneros, épocas y latitudes, también excluye obras de igual – y hasta mayor – calidad: no puede haber una lista unánime, pero sí una lista suficientemente atractiva y de alta calidad.
En toda la discusión generada en los últimos días – sin embargo – un hecho ha destacado por encima de todos los demás: el clamor prácticamente unánime porque no se excluyera de la lista oficial la gran novela de Carlos Luis Fallas (Calufa):Mamita Yunai. Literalmente miles de personas han manifestado por diversos medios, pero especialmente en las redes sociales que se expresan vía Internet, su solicitud vehemente de que Mamita Yunái se mantenga como parte de esta lista. Al parecer, esta lectura es sentida y apreciada por los costarricenses como un símbolo básico de nuestra identidad nacional, de nuestra historia y nuestro carácter, además de representar una de las obras cumbre de nuestra literatura.
Como reconocimiento a este reacción tan espontánea como masiva, el día de hoy – lunes 21 de junio de 2010 – el Consejo Superior de Educación ha tomado en firme la decisión de mantener a Mamita Yunai, de Carlos Luis Fallas, dentro de la lista oficial de lecturas para la Educación Diversificada, a nivel de undécimo año.