La repitencia: una herramienta que debe desterrarse
Leonardo Garnier

La repitencia en las escuelas de América Latina es un instrumento que debe ser desterrado, ya que sus resultados han demostrado reiteradamente no solo su ineficacia, sino su impacto negativo sobre los procesos de aprendizaje. Tal es una de las conclusiones más sólidas del Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo (TERCE) realizado por el Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación, de acuerdo con el más reciente Informe de Resultados publicado en Julio 2015, en el Cuadernillo No. 3: Factores Asociados del Aprendizaje.
El informe lo plantea en términos absolutamente claros en sus recomendaciones:
“Reemplazo del mecanismo de repetición: La evidencia arrojada por el estudio TERCE muestra que la repetición es uno de los factores que tiene una relación negativa de mayor magnitud con el rendimiento. Este resultado es consistente con la evidencia recolectada en el previo estudio regional (Treviño et al., 2010). La repetición, orientada supuestamente a mejorar los aprendizajes de los estudiantes, aparece como un mecanismo ineficaz que se asocia con menores aprendizajes. Es posible que traiga consigo problemas de estigmatización, motivación y de ambiente del aula que dificulten el desempeño de los estudiantes que han repetido el grado.
Por ese mismo motivo – dice el informe – es indispensable buscar fórmulas preventivas para evitar el rezago y dejar la repetición como último recurso en situaciones excepcionales. Se recomienda diseñar y probar programas de apoyo académico en disciplinas específicas para estudiantes rezagados. Estos programas deberían estar al servicio de escuelas y docentes, quienes deberán implementarlos. Tales iniciativas requieren de un horizonte temporal definido para conseguir sus objetivos, de manera que se pueda evaluar el progreso de los estudiantes continuamente, y ajustar o adoptar estrategias adicionales por períodos específicos de tiempo y en caso de que sea necesario”. p. 53
Es en el contexto de estos resultados - reiteradamente comprobados en toda América Latina y consistentes con las evaluaciones internacionales que muestran no solo la ineficacia, sino el efecto perverso de la repitencia - que debemos seguir avanzando hacia esquemas más sofisticados de evaluar los procesos de aprendizajes y atender el problema de los rezagos y los diversos ritmos de aprendizaje de los estudiantes, identificando sus distintas causas y aplicando las herramientas remediales adecuadas a cada una. La repitencia... no sirve.